sábado, 21 de marzo de 2015

Dadme un lápiz



(contra la mala gestión sanitaria de la polio en España)

Vosotros, villanos  con pies de barro
tiranos de corazón de piedra,
escritores con espantosa letra
de una historia de mal fario,
dadme un lápiz.

Autores con renglones torticeros,
de un cuento que no pude cambiar,
y me hicisteis protagonizar
pagando un alto precio,
dadme un lápiz.

Sí, dadme un lápiz de negra mina
para corregir la ortografía
de vuestra historia siempre vacía,
de aquella caridad mal entendida.

Pusisteis los acentos muy mal.
No se acentúa el oropel
sino a mí, la niña hecha mujer
peregrina de hospital en hospital.

Pusisteis los acentos sin ningún tino.
No se acentúa el fasto huero
sino el combate imperecedero,
el de este hombre que fue niño.

No se acentúa el innoble gobernante,
ídolo de barro, vestido de lodo.
Dadme un lápiz para tacharlo,
que no merece siquiera ser borrado.

Fatuo, burdo, vacío.
Valor soy yo, no tu.
Valentía es la mía. Tú, cobarde.
No te voy a dejar por vencedor.
Dadme un lápiz, que quiero tacharlo.

Ante los gobernantes de hoy
alzo mi lápiz: corregid.
Quiero enseñaros dónde iban esos acentos
que pusieron sobre el oropel y el fasto,
ya que no puedo corregir la vida.
El acento va en el hombre, va en la mujer.
Es por nosotros por quienes lo alzo,
atended dónde poner los acentos.
Acentuad ahora lo que el tirano quiso ocultar.
No seáis vosotros también tiranos.
Tomad el lápiz.



1 comentario: